El dulce típico navideño por excelencia en Ibros es la empanadilla de almíbar, un dulce exquisito basado en una receta ancestral que ha ido heredando generación tras generación. La empanadilla es la reina de los dulces de la Navidad en Ibros y su consumo se extiende a toda la comarca de La Loma, donde es igualmente apreciada. Desde hace 24 años la panadería “El Meón” viene elaborando este exquisito dulce los días anteriores a la Navidad. Cientos de docenas salen diariamente de su horno para los hogares de Ibros y distintos pueblos limítrofes, sobre todo en Baeza, donde, nos cuenta Antonio Rus, propietario de la panadería, las empanadas son muy apreciadas y requeridas; en estos días atienden muchos encargos.

En otras épocas, las madres de familia solían elaborar las empanadas. Su elaboración es larga y precisa, a la masa de aceite de oliva y vino blanco se le va dando forma de empanada, en su interior lleva el codiciado cabello de ángel que sale de las cidras, una calabaza que se cosecha en otoño. La cidra es cocida y de su interior se extrae en finas hebras el delicioso manjar conocido como cabello de ángel. Terminado su proceso de elaboración, se fríen en sartén con aceite de oliva y después se secan para darle el “lustre”, el barniz con agua azucarada. La empanadilla termina siendo un dulce crujiente, exquisito que mantiene su consistencia durante días.

Empanadas de almíbar

El horno de Antonio Rus, conocido popularmente como el horno de “El meón”, es un negocio familiar donde trabajan estos días, sin apenas descanso, para atender los numerosos pedidos de su clientela. De su obrador, además de las empanadillas, otros típicos dulces se cuecen, en su mayoría en el horno de leña, que le dan un sabor tradicional, como los pericones, mantecados, pasteles, roscos etc. El pericón es también un dulce típico que se come todo el año -nos cuenta Antonio- aunque más en la feria de Ibros, un dulce elaborado con masa de aceite de oliva bañado con merengue

En Navidad el favorito es la Empanada, como dice Antonio, “la de sartén, típica de toda la vida que hacían nuestras abuelas, madres, y en la pastelería de la Epifanía. Ya cada vez se hace menos en las casas. Ahora todas las panaderías hacemos empanadas”.

“El Meón” es un negocio familiar que se caracteriza por las numerosas variedades de dulces navideños que elaboran de manera artesanal. Una familia que trabaja unida, como una piña, Antonio y su esposa Beli, y sus hijos Manolo, Julia, Juani y su sobrino Alonso. Cada época tiene sus dulces y en esta de Navidad el más apreciado es la empanada de almíbar.

Fotos: R. Espadas


Nota: Este artículo a fecha de  20/Enero/2020 había recibido 1.102 visitas

Rafael Espadas

Editor

Por Rafael Espadas

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